Rompiendo Muros pudo comunicarse con el integrante argentino de Road to Hope, Héctor Farías González, que está con el grupo que se quedó en Libia.
La extrema fragilidad legal, el vacío de conducción y organización y la difícil situación de hacinamiento solo tiene su contraparte en las muestras de cariño, afecto y apoyo de la población autóctona. Todavía albergan una, acaso, última ilusión depositada para dentro de unos días.
El testimonio de Héctor es claro e implacable:
"Son las 23.15 de la noche ( 17.15 hora de Argentina) de este domingo interminable y acabamos de llegar a Tobruk a donde regresamos luego de nuestro frustrado paso por Darna en busca de abordar el barco que nos hubiese llevado hasta Eipto.
Hoy por la mañana, después de haber estado por 4 días virtualmente detenidos y alojados en condiciones deplorables en el mismo puerto de Darna, y sin poder salir de él ni recuperar nuestros pasaportes tuvimos que apelar a una medida de fuerza para lograr que se nos restituyera nuestra documentación y se nos permitiera la vez salir para regresar a Tobruk en cuyo puerto el próximo domingo están puestas todas nuestras esperanzas.
Hoy se tuvieron que regresar otros siete compañeros por lo que en este momento debemos ser unos 55 los que quedamos aquí de los mas de 140 que salimos desde Londres, y si bien la mayoría de ellos se tienen que volver a sus países de origen por razones familiares o de trabajo la situación no deja de afectarnos moralmente. Duele ver que se tienen que regresar aquellas personas con las que compartiste tu sueño.
Nuestra situación en Libia es hoy de extrema fragilidad ya que nuestro estatus actual es de franca ilegalidad en razón de que ingresamos a este país en un "corredor" abierto por sus autoridades para pasar hasta la frontera con Egipto para lo cual no se nos requirió ni concedió visa, de modo que por un lado fuimos beneficiarios de una decision politica que hoy de manera paradojal nos coloca en un situación extremadamente delicada ya que al no logar nuestro cometido estamos varados en este país en condicioón de ilegales con el enorme riesgo para nuestra libertad personal que eso entraña.
Integrantes de Road to Hope en Libia |
A la vez una buena parte de las buenas gentes que conforman esta experiencia nuestra del Road to Hope se encuentran exhaustas pero con su esperanza intacta, construida ella desde la ausencia de razones objetivas es verdad, pero también desde el tesón de quienes saben lo que quieren y que no tienen espacio para otra cosa que no sea el seguir adelante.
En gran medida nuetro futuro esta en manos del gobierno Libio ahora y será nuestra suerte la que ellos quieran que sea.
Esperamos por un barco el domingo próximo, esperamos por un milagro".
Seguiremos informando...
Fernando Casares
Yo no creo demasiado en los milagros hoy día, pero si es necesario que Ocurra ese Milagro para los integrantes del Convoy Road To Hope, para que se aclare su situación y puedan salir los que aún quedan, de camino a Gaza para llevar la Ayuda Humanitaria, pues ¡Hagase el Milagro, pero hagasé Ya...!.
ResponderEliminarMi Solidaridad con Todos Ellos...
Abrazos