¡Road to Hope: silencio mediático y resistencia!

Rompiendo Muros informa, a través de Héctor Farías González, que las esperanzas de algunos integrantes del convoy se han perdido definitivamente hasta lograr hacerles desistir de su resistencia y volver a sus países de origen.

Sin embargo, la gran mayoría todavía alberga esperanzas, porque como diría Ernesto Sábato, "en la resistencia habita la esperanza". Y la misma no va cesar a pesar de los obstáculos aparecidos en el camino.

El integrante argentino acaba de expresar lo siguiente:

"Hemos regresado todos hasta Tobruk en procura de encontar una salida aunque sea por mar, nuestras posibilidades son muy limitadas y la cerrazón en materia periodística establecida por los medios masivos es inmoral. Solo Teherán Times y Nuevo Diario de Santiago del Estero se han hecho eco de nuestra situación".

"Aún quedamos unas 65 personas de las mas de 100 que eramos al partir con Road to Hope. Las esperanzas en verdad son muy pocas, pero el empeño que le pondremos será cada vez mayor. Les repito mi pedido en el sentido de colaboración para lograr toda la difusión posible acerca de nuestra situación pues la desolación en la que nos pone el aislamiento informativo es enorme".

"Somos concientes de la importancia política que tiene el hecho de que podamos romper el bloqueo, y es por ello que la resistencia que se nos opone es tan grande. Pero no es esa necesidad política la que nos da fuerzas en estos momentos sino el hecho de saber que quienes viven en Gaza nos están esperando".

"Quienes se oponen a un gesto de humanitarismo elemental como el nuestro deberían saber que lo intentaremos hasta el final, y luego del final, si este no fuera feliz, lo volveremos a intentar... Las personas no deben medirse por las cosas que logran en la vida sino por la perseverancia y empeño que ponen al perseguir sus sueños".

Héctor Farías González, integrante argentino de Road to Hope

Consultado Héctor sobre el estado del integrante español, nos dice:

"El ciudadano español que estaba enfermo se regresó a su país hace ya dos días y creo que está muy bien por cierto....las posibilidades de pasar a Egipto son, en mi opinión, nulas por ahora.


Las personas comunes aquí en Tobruk nos brindan su apoyo y calidez en cuanto se anotician de que vamos con ayuda a Gaza.


En mi país el Senador Emilio Rached ha presentado un proyecto en el Congreso Argentino para expresar su preocupación por la suerte de Road to Hope y la mía en particular de modo que espero que eso ayude mucho en nuestro empeño.


De igual modo la Cancillería Argentina, a quien personalmente informé de nuestra suerte, al igual que a través del Senador Rached, se esta ocupando a través de nuestro embajador en Egipto de realizar gestiones por nosotros y van a tratar, de aquí en más, de coordinar sus esfuerzos con los de las embajadas de los otros países a los que pertenecen los demás miembros del convoy.


Nos hemos regresado hasta Tobruk en espera de descomprimir un poco la situacion, salir del aislamiento ver si tenemos un poco más de acceso a la prensa.


Pero básicamente para ver si se encuentra una salida por mar hasta Al Arish, en ese punto nuestro problema no es ya de índole política sino financiera ya que no disponemos de los fondos para sufragar los gastos que ello demandaría. En estos momentos aquí y en Londres como así también en otros sitios se están haciendo gestiones ante oficinas gubernamentales y no gubernamentales para lograr ayuda.


Nuestra intención original de ir por tierra no ha sido abandonada pero en verdad no creo que ello sea posible ya.


Cuando te encuentras en situaciones como la nuestra, y la fantasía no tiene cabida alguna, es cuando te das cuenta del poder enorme que tienen los amos del mundo, y en especial Israel, hasta el punto de poder declarar la invisivilidad de todo un convoy.


Un abrazo para todas las personas que, como es mi caso, siguen creyendo que un mundo más bueno y más bello es posible".


Road to Hope. Tobruk, 16 horas de Libia.

Integrantes de Road to Hope en Tobruk

Palabras que dejan clara una situación dramática y de la que nos hacemos muchas preguntas que sólo los responsables de todo esto deberán responder.

Fernando Casares